El secreto persuasivo de Tony Robbins

Tony Robbins es un maestro de la persuasión.

A menudo compara dos situaciones diferentes para resaltar la importancia de tomar una acción específica.

Por ejemplo, comparar la sensación de quedarse estancado en una vida insatisfactoria con la emoción de alcanzar un objetivo significativo.

Cuando hace esta comparación, en realidad está haciendo uso de uno de los principios persuasivos más importantes: el contraste.

Verás, nuestro cerebro está constantemente contrastando y comparando cosas para hacer juicios y tomar decisiones.

Si algo es muy diferente a lo que esperábamos o a lo que ya conocemos, es más probable que lo notemos y lo recordemos.

Por eso, cuando utilizamos el contraste en nuestra comunicación, estamos aprovechando este proceso mental para resaltar ciertas ideas o conceptos.

Vamos, que este principio lo encuentras en todos lados.

Desde la publicidad hasta las ventas, pasando por la negociación y el liderazgo.

Por ejemplo, al destacar las características o beneficios de un producto en comparación con la competencia.

Otro maestro de la persuasión es Elon Musk, quien a menudo contrasta su visión de un futuro tecnológico con el mundo actual, destacando la necesidad de cambiar y evolucionar.

Y, de hecho, otro de los grandes maestros en el uso del contraste es Eminem (de quien hablábamos ayer). Pues, no sólo usó el principio de contexto a su favor, sino que también supo distinguirse de todos los demás. No solo por su color de piel, sino por los temas sociales que tocaba (la matanza de Columbine, el ataque a los grupos pop, hablar mal sobre su madre, etc.) E incluso en sus videos musicales solía ser muy irreverente en contraste con sus contrapartes.

En lo personal, el contraste es uno de los principios que más me gusta usar. Es una técnica muy efectiva y poderosa, y se puede utilizar de muchas maneras diferentes.

Es más… en este artículo hay muchos ejemplos de contraste… ¿los notaste?

Desde párrafos cortos contrastando los párrafos largos, hasta el uso de negritas para resaltar algo.

En fin, suficiente por hoy.